lunes, 29 de agosto de 2016

Autoterapia de conciencia colectiva: Ello, yo y superyo.

Y cuando aprenda la lección
supongo que ya no pensaré en ti a cada momento,
Y mi yo, mi ello y mi superyó dejarán de sentir
que haces falta por las mañanas
cuando me levanto empapada de un sudor frío
ese que no me deja descansar, que me limita a sólo...
buscar un pretexto estúpido para tenerte, para poseerte.

Cuando ello deje de sentir que te necesito 
pegado a mi cuerpo las 24 horas al día
y que todo gire en torno al cálido sentimiento de un beso
a la incesante sensación de tu piel desnuda encima de mi cuerpo
o al delirante olor de tu cabello y su textura,
Ese excitante momento de atraparte entre mis piernas y de necesitarte
y de desearte como una loca.
Porque eso es justo lo que siento cuando te escucho
cuando te huelo
cuando siento que estás ahí, en silencio
observándome.
Soy una loca que se deja convencer por ello
y te quiere por pura pulsación de mi cuerpo
de vibrar y de sentir que se me enchina la piel del cuello
cuando escucho tu voz,
cuando pienso en ti.

Y es que entonces, mi superyó te busca también
y trata de no entrar en conflicto con la lujuria, trata de mediarte
de no soñarte
de no pensarte
de no sentirte.
Trata de alejar cualquier sentimiento,
pero es inevitable.
Eres esa fuerza magnética, eres esa inconsciente y maldita
realidad y atracción que termina por ceder
y por buscarte una y otra vez.

Y mediando entre las dos, yo
yo que siempre lucho y me enfrento
a esta terrible soledad, a esta terrible realidad
al no poder verte por las mañanas y a imaginar
cualquier historia de los dos
de esas que sólo rondan  por mi cabeza y en mis sueños
porque tú ya no estás.
Es impensable el sentimiento, es delirante
me vuelve loca, me convierte en nada
me devasta
me aniquila
y pienso aveces
¿Cuándo dejaré de sentirla?
cuándo dejaré que todo simplemente desaparezca
porque entonces se que yo, ello y superyó se confabulan
en mi contra, es cuestión de análisis
de saber que esta conciencia colectiva
se convierte en un inconsciente sentimiento
que termina por derrotarme y tumbarme
al final del día en una fría cama,
esperando cerrar los ojos para ya no pensar.

Its fukin painful! 

jueves, 11 de agosto de 2016

Autoterapia de sinceridad absoluta: diciendo las verdades.

No me digas que no me gustaba nada de tí,
Si compartía contigo
noches enteras amándonos, 
de que te vinieras en mi boca
de besarte todo
de acariciarte desde la punta del pelo
hasta los dedos del pie...

No me digas que no me gustaba tu música,
si contigo aprendí a escuchar a Bunbury
A héroes del silencio
Mago de Oz.
Aprendí a escuchar tus silencios
aprendí a escuchar tus sonidos
mientras dormías, esos también que hacías todos los días
después de bañarte y limpiarte la nariz.

Aprendí tus horarios de las gotas que usas
aprendí tus horarios de querer tomar
de querer comer
de querer coger
de querer soñar.

Me acoplé a como me tomabas de la mano
me acoplé a levantar las piernas altas muy altas,
por encima de tu cuello casi, para que me penetraras
y terminaras gozando mientras yo aveces te acariciaba allá abajo
y entonces quedabas impregnado dentro de mi.

Y qué hay del gusto adquirido por el fut bol?
Y por el soccer?
Y por el beis?
Que hay de mis horas contigo en el raquet
de mis horas escuchándote hablar de coches
y ver cada carro que pasaba por la calle
admirarlos y sorprenderme, sin saber ni jota de lo que hablabas.

No me digas que no traté de cocinarte lo que te gustaba
hacerte los gustos mas simples, o más extrafalarios.
¿Te acuerdas del chile de amor con sal de cada platillo?
¿Te acuerdas de la poquita mantequilla que untaba en tus lonches?
¿Te acuerdas de los taquitos de frijolitos en harina por las noches?
Y todo eso lo hice por tí
y para tí.

Y ahora me dices, que soy una déspota,
que te doy hueva
que soy intransigente
que soy molesta
que siempre te traté mal
que nunca te escuché
y que no te he tomado en cuenta.

Si toda mi vida cambió
y se dio para tí completa.

Hoy... en la soledad de mi casa, sola como estoy
te recuerdo... recuerdo tus brazos
recuerdo la textura de tu pelo
recuerdo tus labios
tu sabor
recuerdo que muy a pesar de los gritos
y de todo.. me refugiaba por las noches en tu cuerpo
que adoraba abrazarte
y que muero completamente por volver a sentir tus brazos
rodeando mi panza
y tus piernas encima de las mías cuando dormíamos.
Que muero y muero completa el día que tu cuerpo
empapado, me bañe y me talle la espalda 
con tu delicadeza esa de "tallar un camión de ruta".

Porque tu si eres el amor de mi vida
y yo si he aceptado tus groserías
tus insultos
tus palabras hirientes
esas humillaciones
y esos cambios de humor 
los gritos
y te he perdonado las palabra más tristes
y las etiquetas humillantes hacía mi.

Y eso.. por que te amo.
Porque te amo como eres, y así te he aceptado siempre.
Y entonces? A dónde voy con todo esto? Qué necesito de ti?
Necesito de ti simplemente para poder vivir.
Necesito todo de ti.